EL PP DESMIENTE LOS ARGUMENTOS PARA LA CONCENTRACIÓN DE LA AYUDA A DOMICILIO Y DENUNCIA QUE ESTÁ ALENTADA POR EL PSOE

Utrera, 17 de junio de 2024. Una clara manipulación política disfrazada de reivindicación laboral, así ha calificado el Partido Popular la concentración que en la jornada del jueves, 13 de junio, protagonizaron ante la puerta del Ayuntamiento las empleadas del Servicio de Ayuda a Domicilio y a la que se sumaron el ex alcalde Villalobos y sus concejales de gobierno, así como el presidente de la UTER y la secretaria de la federación.

Si tantas y tan ciertas son esas reivindicaciones laborales, ¿por qué Villalobos no las resolvió cuando fue alcalde, en lugar de dejar la Ayuda a Domicilio sin contrato desde 2019 y con nueve prorrogas?

Con respecto a la municipalización del servicio, un invento de Villalobos un mes antes de las elecciones para tratar de paliar el malestar y las críticas de las trabajadoras, llama poderosamente la atención que el ex alcalde no hiciera lo que ahora reclama. ¿Por qué el gobierno del PSOE, con mayoría durante sus dos mandatos, nunca habló del asunto y no hizo municipal este servicio? Pues sencillamente porque sabía que no es una operación que interese al consistorio y, como muchos otros servicios, puede estar externalizado. Es más, si como presumía tenía 18 millones de superávit, nada le impedía tomar esa decisión, pero lo cierto es que la intención de los socialistas de municipalizar el servicio era tan falsa como sus superávits millonarios.

Además, la prueba evidente de que no es viable la encontramos en municipios, también gobernados por el PSOE, como Alcalá del Guadaíra o Dos Hermanas, en los que la Ayuda a Domicilio se presta mediante contrato con una empresa externa.

Es falso que el gobierno esté incumpliendo ningún acuerdo porque, tal y como la anterior Corporación había aprobado, antes de la adjudicación se llevó a cabo un estudio por una empresa externa al Ayuntamiento, que analizó las necesidades y el coste del servicio para las arcas municipales y concluyó que la gestión debería ser externa.

En este sentido, no se sostiene que ahora se concentren para decir que ese estudio no les gusta y que quieren otro, con la falsa premisa de que el estudio se debe hacer tomando como base el convenio de la Ayuda a Domicilio y no el de los trabajadores del Ayuntamiento de Utrera. Una petición ridícula, puesto que si aspiran a ser trabajadoras municipales, se les aplicará el convenio de los trabajadores del consistorio, puesto que es lo que reclaman ser. Además, tanto el PSOE como los sindicatos saben que el Ayuntamiento de Utrera es una entidad en sí misma que dispone de convenio propio, sea cual sea el trabajo que desempeñe un trabajador municipal está sujeto al convenio del consistorio.

Por otro lado, el hecho de que se trate de un servicio esencial, como están reclamando, no conlleva que estas trabajadoras deban estar en una situación diferente al resto de trabajadores, que también prestan servicios esenciales para todos los utreranos, pero no por ello son trabajadores municipales.

No hay que olvidar que después de años sin existir un contrato, el gobierno del PP adjudicó el servicio a una nueva empresa hace apenas dos meses, evidentemente respetando el convenio laboral de este colectivo pero, además, en el nuevo contrato se han tenido en cuenta cuestiones demandadas desde hace años por las trabajadoras, como la agrupación de horas de trabajo que evitan las jornadas parciales que afectaban al 90 por ciento del servicio e impedían la conciliación de la vida laboral y familiar.

Desde el Partido Popular seguiremos denunciando que estamos ante una manipulación política, en la que también están participando sindicatos y algunas empleadas con intereses que nada tienen que ver con lo laboral y, por supuesto, el presidente de la UTER, José Carmona y la secretaria, Roció Acosta, cuya presencia en esta denota una vez más que están ahí para poner la federación vecinal al servicio del PSOE y no de sus asociados.

Cabe destacar que el PP ha trabajado intensamente para garantizar que los servicios se presten de manera eficiente y acorde a las necesidades de los ciudadanos, manteniendo siempre el compromiso con la transparencia y la buena gestión de los recursos públicos. Esta concentración, fomentada por intereses partidistas, sólo busca desestabilizar la gestión actual y confundir a la opinión pública.